Se lo hice y regalé a mi padre en agradecimiento por la caja de lápices de colores que él, a su vez, me había regalado previamente. En ella, aparecía impreso el motivo del perrito fumador que copié para él. Desde entonces, siempre estuvo en su cartera impregnado de emoción y orgullo paterno, hasta que, a partir de su fallecimiento, lo conservó mi madre para devolvérmelo.
Yo tenía entonces cinco tiernos años y hoy lo traigo y comparto aquí por lo que tiene de entrañable y emotivo para mi memoria, confiando en que se comprenda y me sea disculpado el arrebato de filial romanticismo nostálgico.
FRM [28/09/2014]
"El perrito de la pipa", lápices de colores, 19 febrero 1953 |
No disculpado,si no que agradecido este gesto de compartir con nosotros tan íntima ternura...Muakiss!!
ResponderEliminarGracias por entenderlo y sentirlo así, querida amiga. Besos grandes.
Eliminar¡Qué bonito dibujo!... Tan tierno ese perrito con la pipa. Y esa firma tan perfecta para un niño de tan pocos años. Me ha encantado, Francisco. Un trozo de papel cargado de sentimiento. Gracias por compartirlo.
ResponderEliminarCómo me gusta que te guste y lo comentes con ese enorme cariño. Gracias a ti preciosa Ángeles.
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