El Rincón del Nómada

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La libre soledad del ermitaño es el terreno más fértil para que germine y florezca la creatividad. (Foto propia, 2014. Isleta del Moro, Almería)
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lunes, 19 de febrero de 2018

Ser agua

Mirada metafórica al final de la jornada. Mecido por la marea del Cantábrico

Desde que Bauman lo usó como conocido eufemismo, "lo líquido" ha adoptado una cierta comprensión peyorativa para muchos. Lo entiendo y debe respetarse. Sin embargo, personalmente reivindico mi intento de identificación con el agua... Y no por la famosa frase de Bruce Lee popularizada por la publicidad televisiva: "Be water my friend". No, lo mío viene de mucho antes, de muy lejos en el espacio y en el tiempo...

Hubo un tiempo en que fui rígido, firme e inflexible. Exigiendo con intolerancia que todo y todos fuesen como yo entendía que tenían que ser; bajo la coartada inmadura de que no pedía nada que no estuviese dispuesto a hacer yo mismo. Me equivocaba. Lo aprendí antes de romperme... o casi, pero sin poder evitar que otros se rompiesen por ello.

Hoy y desde que tomé conciencia de ello, soy agua. O debería decir que lo intento y me esfuerzo en conseguirlo.

Porque el agua es vida, acaricia y alimenta a la rosa y no es desgarrada por sus espinas. Fluye continua y vivificante. Sigue sus cauces, se amolda, o abre paciente otros nuevos al discurrir con constancia. Salva obstáculos y, en ocasiones, los arrastra, erosiona o desborda, pero nunca se detiene. Capaz de estar presente en varios estados; líquida y viva; gaseosa en vaporosa compañía que envuelve, empapa y humedece; condensada en nubes que hacen soñar con diferentes formas; cubriente hasta derretirse, como blanca, bella, amorosa y blanda nieve; y sólida y resistente como el hielo ante las bajas temperaturas, como un iceberg indiferente que solo muestra un poco de su gélido volumen total...

Así soy. O así intento ser, hasta que mi vapor se disperse en el cielo infinito para llover en algún acogedor océano y me acerque a sus orillas, como una ola que lama las arenas suavemente, sobre relajantes mareas, entre susurros mimosos y acariciantes... Ajeno a las tempestades de otros.

FRM [18/02/2018]