Lo aprendí saboreando mi vida loca
en la que tanto y tan poco he probado.
Dulce, ácido, amargo, salado...
y ese único sabor a ti
que quiero perpetuar en mi boca.
FRM [18/03/2016]
(Foto de archivo) |
El silencio del peregrino solitario es la mejor compañía para la ruta del aprendizaje, la observación, la reflexión y el desarrollo de la creatividad. En este rincón del nómada se irán depositando pensamientos, reflexiones, relatos, poemas, fotografías, dibujos, pinturas... y cualquier otra forma de expresión creativa de su autor que, con esta iniciativa, dejan de ser un acto íntimo y privado para convertirse en público y amistosamente compartido.
(Foto de archivo) |
Umami... ese que se perpetua aún después de la presencia
ResponderEliminarEse. Exactamente ese, Mercedes. Besos.
EliminarLa foto de archivo es muy elocuente, más pornográfico que un desnudo. El texto acompaña. Abrazo.
ResponderEliminarMuchas gracias, Mauricio. Prefiero el erotismo de la insinuación que lo grosero de la exhibición. Abrazos.
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