hasta que encadenen palabras insospechadas.
Voy a llenarte de acentos nuevos
sin tildarte de nada.
Voy a escribir tu delicada orografía
con la más cuidada caligrafía.
Voy a evitar las faltas
con exquisita ortografía.
Voy a reservar en mi pluma la tinta
para rehacer nuestra gramática...
Aparta tu temor y tú serás la Academia
que, a mi lengua, limpie, fije y dé esplendor.
FRM [10/06/2015]
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| Imagen de archivo |
Qué buenas y amorosas intenciones tiene el poeta, qué manera de ejercer el acto de amar sin máculas, con la ortografía perfecta, con el deseo esquisto de que nada falle, de que todo en esa relación con la que se escribe el amor sea perfecta.... Maravilloso enfoque, Francisco.
ResponderEliminarAbrazos.
Teo.
Con mejores intenciones que talento, pero eso es lo que me estimula y guía. Gracias, amigo Teo. Abrazos.
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