El Rincón del Nómada

El Rincón del Nómada
La libre soledad del ermitaño es el terreno más fértil para que germine y florezca la creatividad. (Foto propia, 2014. Isleta del Moro, Almería)

viernes, 12 de diciembre de 2014

Tatuajes de vida

Tengo el alma
tatuada de experiencias,
algunas pintadas con besos
y otras a cuchilladas.

Amores y traiciones
la vida descerraja,
pero ayudan a separar
el grano de la paja.

De nada me arrepiento
aunque, yo mismo,
lo mismo no haría
en algún otro momento.

He gozado de alegrías
y placeres sin cuento,
pero la mejor lección ha sido
el dolor que he recibido.

Aunque lo que más celebro,
mientras, día tras día, enhebro
es que hayas nacido
para haberte conocido.

Al fin,
he vivido,
he soñado
y soñando vivo.

FRM [12/12/2014]

Foto propia, desde mi ventana.

16 comentarios:

  1. Fátima Reyes garcía12 de diciembre de 2014, 20:14

    Así es la vida Fran...bonito poema,que es toda una reflexión.

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    1. Aprendo de ti humildemente, maestra poemante.

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    2. Fátima Reyes García13 de diciembre de 2014, 14:32

      ¡¡¡Anda ya!!!

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    3. Lo digo en serio. Tienes mucho dentro y lo regalas a tus amigos. Sería tonto si no lo aprovechase para aprender.

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  2. Y como diría un castizo: "... y lo que te queda, ¡majo!" Un abrazo!!!!

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  3. Y sigue soñando.....está bien mirar atrás y ver lo que ha sido para seguir aprendiendo. Me ha gustado mucho, y la foto es preciosa. Un abrazo

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    1. No puedes imaginar cuánto valoro tus palabras, Susana. Muchas gracias por dedicármelas y por su contenido. Un fuerte abrazo.

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  4. Francisco, es una lección que debemos aprender todo: a vivir. Y tú demuestras haberlo hecho con intensidad, recogiendo todo aquello que la existencia nos pone en el camino para aprender, corregir, y estimular el alma. A la postre queda la persona, la figura acabada de modelar presta para ser gozada en su portentosa madurez. Ahí te siento en ese último "Soñando vivo". La fotografía lo dice todo. Muchísimas gracias.
    Teo.

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    1. Qué puedo decirte, Teo. No puedo quejarme, pues, por mucho que me pueda faltar, no es poco lo vivido. Y es verdad que, como caricias de pulidor o golpes de cincel, ello me ha ido tallando en vivo, aunque... soñando vivo. Gracias y abrazos, amigo.

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  5. La experiencia va dejando su huella en nuestra piel.
    Todo un camino con sus desviados senderos.
    Un gusto leerte, comparto con tu permiso.
    Reme.

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    1. No te imaginas el gusto que me dan visitas como la tuya. Gracias, Reme. Me honran tus palabras y es un placer que compartas las mías. Besos.

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  6. Con qué belleza describes las marcas que deja la vida en el transcurrir de nuestra existencia. Tatuajes que se pegan a nuestra piel más interna, señales primorosas en algunos casos, cicatrices menos estéticas en otros, pero siempre serán indicativos de enseñanzas que nos trajeron hasta donde estamos. Y más hermoso es ser capaces de no perder la capacidad de soñar y volar. Me ha encantado, gracias querido Fran!

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    1. Belleza que tú eclipsas con tus luminosas palabras, Mati. De ellas rescato lo positivo que nos ha traído donde estamos, soñando y volando. Me encanta que te encante. Muchos besos.

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  7. Somos como somos por toda la carga que hemos vivido y sentido, amado y odiado, tristezas, alegrías, llantos, risas, amores y desamores, tiempos plenos y otros de vacas flacas. Creo que no hay que arrepentirse ni siquiera de lo malo, porque eso seguro que nos hizo crecer. Muy bello el poema, amigo, me ha gustado mucho. Besitos

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    1. Ciertamente, Karyn. Los pasados errores no son tales, son más experiencias para el aprendizaje permanente. Muchas gracias por tus palabras, amiga. Besos.

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