El Rincón del Nómada

El Rincón del Nómada
La libre soledad del ermitaño es el terreno más fértil para que germine y florezca la creatividad. (Foto propia, 2014. Isleta del Moro, Almería)

martes, 26 de febrero de 2019

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Mirada metafórica. Foto propia

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FRM [22/02/2017]

lunes, 25 de febrero de 2019

Corazón de Narciso

Mirada metafórica. Foto propia, paseando por Madrid

Para los corazones fríos y egoístas, la amistad y el amor son sentimientos superficiales, tan efímeros, aparentes, fugaces y engañosos, como una escultura de agua con volátiles e inestables formas que sólo se congela inmóvil ante la mirada del fotógrafo que capta y perpetúa su esencia gélida y mendaz.

FRM [14/02/2017]

jueves, 21 de febrero de 2019

Disney en mis primeros gouaches

"Lobito"

Como he dejado constancia en este mismo "Rincón" (Ver enlace aquí), fue al filo de mis diez años de edad cuando me estrené en el uso de los pinceles como herramienta y el gouache como materia prima.

Aquel hallazgo me gustó, y llevado por el entusiasmo del primerizo y el encanto que entonces me inspiraban los personajes de Walt Disney, me dediqué a practicar, copiándolos como loco, como testimonian estos reaparecidos dibujos de aquella época.

FRM [13/02/2017]

Dibujos coloreados con gouache, 1957

Disfruto con la lengua

"El pozo de Murakami". Metáfora de mil puertas.

Aunque no soy filólogo, amo las palabras y, sobre todo, gozo y me divierto jugando con ellas. Mantenemos una antigua, íntima y fiel relación erótica y sensual.

Las busco, persigo, alcanzo, acaricio, saboreo y me revuelco revuelto con ellas, algunas me fascinan y otras me repelen. Siempre atraído por sinónimos y antónimos. Rebusco curioso en su génesis etimológica que aclara, deforma, recuerda y olvida o enmascara conceptos. Viajo apasionado en el diccionario. Me deslumbran los neologismos brillantes. Leo con avidez y escribo con timidez... Nunca inmóvil...

Ante la R.A.E., jamás sedente y, con frecuencia, disidente. Pero siempre disfrutando.

FRM [20/02/2019]

miércoles, 20 de febrero de 2019

Olvidar

El suave vuelo de los recuerdos. Mirada metafórica.

Cuando la vida enfrenta a situaciones de pérdidas dolorosas e irreparables —a veces, varias diferentes y concentradas en breve espacio de tiempo— acostumbra a aparecer alguien, siempre bienintencionado, que te ofrece consuelo con el clásico consejo de "olvidar lo malo y recordar sólo lo bueno". Como si fuese posible separar lo agrio de lo dulce en el conocido plato de pollo de la gastronomía china, una vez condimentado. No, no es posible.

Recordar es inevitable. Y olvidar no es fácil. Nunca lo fue. Ni lo será. Para olvidar es imprescindible recordar qué hay que olvidar, así como recordar lo que no hay que olvidar.
                                 
Pero es difícil. Muy difícil este aparente trabalenguas paradójico con el que, en ocasiones, nos despierta y agita la existencia.

Arrancar un pedazo del alma siempre deja heridas. Y duele.

El olvido pelea con lo más profundo de nuestro ser y se abre paso en forma de cristales rotos que se clavan al resbalar por las mejillas, hiriendo de sal. Disparando a quemarropa al presente. Haciendo inútil el silenciado adiós que quemó los labios y acuchilló la comprensión.

Y uno se queda así, intentando entenderlo para poder olvidarlo, con el pecho encogido. Sin salida... En el estruendo del silencio.

Olvidar es desear el cielo de un libro nuevo para dejar atrás historias viejas. Decoloradas. Muertas. De las que dicen que nunca se olvidan... porque "eran para siempre". Y es cierto. Es sentir el fuego implacable de un infierno donde se queman las alas del alma. Devorándonos.

Olvidar es mirar al infinito. Y no ver nada. Dejar en un pozo profundo y oscuro lo vivido. Mientras ahoga. Vaciar lo que ayer nos llenaba.

Olvidar es arrancar. Rabiar. Golpear. Gemir. Desgarrar. Congelar. Horadar. Aplastar. Caer. Caer. Caer... Y en esa caída. Dejarse la piel a tiras; desgarrada. Sin aceptar. Sin entender. Absurdo, porque, mientras, si se intenta entender, se impide el olvido.

Olvidar es convertir el todo en la nada. Y la nada en despedida aceptable, asumible. Y renacer, si ello es posible. Porque olvidar es muerte. Muerte en vida. Y la muerte no se olvida.

Por eso, prefiero recordarlo todo y, con lo aprendido, enriquecer la experiencia para el resto de mi existencia.

FRM [30/01/2019]

Ombliguismo

Foto propia, falso "Omphalos" u ombligo del mundo.

Engreído, pedante, petulante,
con tanta prepotencia que produce flatulencia.
Ególatra impenitente.
Displicente y distante,
egoísta de manual.
Onanista visceral
que se auto adora en lo que dice y hace
y se masturba los sentidos,
reaccionando a sus partos y comentarios
con sus propios "me gusta", como un niño consentido,
abriendo camino a los coros y danzas
que le llenan, hinchan y dan prestancia.

Esteta autodeclarado, narcisista,
es obscenamente maleducado,
frío, inmodesto y arrogante,
por rubias carretas obsesionado.
Sin respeto a otros modales
que los más hipócritas y puritanos.
Fatuo amante del lucimiento, pretencioso y atorrante,
explica extensamente que habría mucho que decir,
sin decirlo en ningún momento... Soberbio sin fundamento.
Se pavonea en su corral. (Foto propia)
Corrige a quien le place, pero no oses a su maestría corregir
so pena y condena de eliminación inmediata y eterna.
Falso libertario represor de la ajena libertad de expresión.

Presumido y vanidoso, está encantado de haberse conocido...
Pues, ¿sabes lo que te digo?
No me interesa ni gusta tu ampuloso ombligo,
se lo cedo sin dudarlo a los amigos del barrio
de tu corte de los milagros,
porque algo que te gustaría, sólo es mío hoy en día.
Confórmate citando amistades y conocidos relevantes
para sentirte importante, cuando sólo hablas de ti mismo,
olvidando que, quien de verdad es alguien,
no necesita decirlo ni precisa exhibirlo,
se le nota, lo transmite en humilde silencio,
sin mención ni lucro de lo ajeno.

FRM [13/02/2019]

El día menos pensado

Foto propia. "Escalera al cielo", en CaixaForum, Madrid

Algún día.
Una mañana o una noche…
qué importa,
nos encontraremos frente a frente.

Quizás hayan pasado más años
de los que la piel puede soportar
sin cosechar surcos.

Quizás, tú o yo, o ambos,
ya suframos la herencia
de nuestros errores en la vida.

Puede que arrastremos nuestros esfuerzos
cargados en la espalda junto al tiempo.
O que, al fin, hayamos aprendido a sonreír.

Ese día... nos miraremos a los ojos
y los inviernos caerán de golpe
en nuestras manos.

El nómada en la cafetería de CaixaForum, Madrid
Todo el frío de nuestra ausencia,
volverá acumulado a nuestra piel erizada.
Nos miraremos y sentiremos
lo mucho que todo ha cambiado...

Pero, cuando mis ojos,
vean más allá de los tuyos
y te miren por dentro,
como ahora te miran en fotografía...

Aún encontrarán,
agarrado con todas sus fuerzas
a las cicatrices de nuestras heridas,
este amor que nace y lucha por ser.

FRM [26/06/2018]

Me bebería la vida

"La paz se bebe la vida". Foto propia en el Parque de María Luisa, Sevilla

Te miro entre tus palabras
y tus ojos me aquietan
con la paz de un húmedo sosiego.

Contigo.
Sólo contigo
destrozo de golpe las murallas que me pone la vida.

A tu lado todo cambia.
Se va la pena.
Se vuelve la risa.

Tú me das vueltas entre las flores.
Me echas raíces.
Sepultas mis despedidas.

Eres cascada que refresca.
Mundo en las manos.
Proa de mi sonrisa.

Cuando estoy a tu lado,
soy lo que de verdad soy
y las horas pasan aprisa.

Contigo.
Sólo contigo.
A pequeños sorbos, como besos, me bebería la vida.

FRM [15/02/2019]

lunes, 18 de febrero de 2019

Si tocarte pudiera

Mirada metafórica de otros ojos

Si tocarte pudiera,
tocaría la tierra
y de tus entrañas
sembradas
recogería hierbabuena.

Si tocarte pudiera,
serías cáliz de poesía, mano suave,
piel sin prisa,
como una sábana de seda
aprisionando mis caricias.

Si tocarte pudiera,
tocaría el cielo
y volaría entrelazado
en melodías
por el dulce adagio de tu pelo.

Si tocarte pudiera,
mujer te quisiera
y no dulce brisa que escapa,
dejando vacías mis manos...
y mi vida entera.

FRM [17/02/2019]

Amor sincero y verdadero

Metáfora visual. Amor en estado puro con "Clío", la perrita de mi nieta mayor.


"Clío" y este nómada. Amor sin posesión.
Es maravilloso sentirse querido bajo los besos más tiernos, sinceros y amorosos... Carentes de todo interés y egoísmo.

¿Cómo no amar a estos seres entrañables? Ojalá entre los animales humanos fuese posible el mismo comportamiento...Sin celos ni posesividad, con generosidad, sin exigencias, sin pedir nada a cambio... Amar por amor, generando más amor.

FRM [18/02/2019]