Él era como la mayoría de los mortales; en el amor se sentía como ante los complejos programas de informática. Le resultaba casi imposible de entender; pero no dejó de intentar aprender a ser un usuario avanzado. Lo malo es que nunca tuvo un buen antivirus...
Y se le bloqueó irreparablemente el sistema operativo.
FRM [19/08/2015]
 |
(Imagen de archivo) |
No hay comentarios:
Publicar un comentario