En las relaciones personales ocurre lo mismo que en la Naturaleza. En
ocasiones, hay que acercarse mucho para comprobar que, lo que parecía una flor diferente, en realidad era un mal bicho.
Y, entonces, te puede picar dolorosamente...
FRM [03/06/2014]
|
Foto propia, paseando bajo mi ventana |
No hay comentarios:
Publicar un comentario